VIOLENCIA franquista en Benavente (Zamora) durante la guerra de España. Parte 2, Los ASESINATOS

Benavente 2 word pressViene de: Estrategias de REPRESIÓN

Desde el primer momento las milicias fascistas y la guardia civil, organizaron para detener Republicanos. Las órdenes de detención tenían su origen en la comisaría de investigación y vigilancia, el gobierno civil y la comandancia militar, donde se elaboraban listas de aquellos que debían ser capturados. En el medio rural, las detenciones se efectuaban a instancias de los caciques de cada localidad. Los detenidos eran conducidos a diversos centros o locales habilitados como prisiones, y desde allí eran «sacados» para ser fusilados al amanecer en las tapias de los cementerios o en otros lugares seleccionados a este fin.

Las edades dde los asesinados variaban entre los 18 años del tipógrafo Eutiquio Altier Boyano y Fulgencio Tesón, hasta los 64 del vendedor Francisco Castaño Domínguez. Por profesiones destacaron los tipógrafos, panaderos, obreros chocolateros, mecánicos, dependientes de comercios, empleados municipales, pequeños industriales, junto con los jornaleros y albañiles. Entre ellos estaban algunas de las principales figuras del socialismo benaventano y de la izquierda Republicana. Casi todos eran trabajadores, mientras que otro sector importante fue la clase media-baja de pequeños propietarios e industriales.

Los franquistas mataron al menos a 3 mujeres de Benavente: Presentación Parra Fernández, 50 años y Visitación Prieto Pajares asesinadas en sendas sacas de la cárcel de Zamora los días 24 y 26 de Octubre de 1936. A María Garea González de 30 años, del Grupo Obrero femenino, casada, tenía 2 hijos, fusilada el 7 de octubre de 1936 junto a su marido y otros 8 compañeros. El testimonio de Pilar Fidalgo en su libro «Una Joven Madre en las prisiones de Franco» es estremecedor, cuenta como llevaron a María Garea a “capilla”, donde encontró a su marido, Venancio Alonso Viforcos, 35 años, cabo de serenos, presidente de la Sociedad de Artes Blancas del mismo sindicato; al reencontrarse por primera y última vez desde su encarcelamiento se abrazaron: “..Se perdieron al mismo tiempo, al alba, sus cuerpos fueron lanzados, aun abrazados, a la fosa común..”.

En su relato Pilar Fidalgo da cuenta del asesinato de la mayor parte de sus amigos de Benavente el 9 de octubre, entre ellos Epifanio Rodríguez Rubio, 55 años, contador de la Agrupación Socialista, concejal del Frente Popular y jornalero; Felipe Martínez Abad, 59, concejal del Frente Popular por el PSOE, albañil; lldefonso López Fernández, 43, Socialista, corresponsal de “La Tarde” en Benavente, industrial, bibliotecario; Enrique Villarino Santiago miembro del PCE; Francisco Fernández Merino, 25, panadero; Luciano García Guerra, 48, miembro de la Agrupación Socialista, industrial, vendedor; Marcelo Carbajo Lora, 31, colaborador de “El Pueblo”, contable; el hijo de un zapatero apellidado Burgos y que no había cumplido los 19 años; Félix Vara Carnero, 34, destacado Vocal de la Agrupación Socialista, obrero chocolatero; Narciso Ibáñez Frontela, 33, pintor; Alejandrino Pérez Prada, 46, camarero, industrial; Teófilo Infestas Riaño, 43, carpintero, empleado municipal.

También menciona Fidalgo a Víctor Calvo Sáez, 28, secretario local de la Agrupación Socialista, contable que “apareció con las piernas rotas, abandonado su cadáver cerca de Puebla de Sanabria, a cuya cárcel le habían conducido desde la de Zamora y Manuel del Río Alonso, 32, empleado de banca y afiliado al sindicato de banca de la UGT, presidente del PSOE Benaventano, que logró huir a la provincia de León, donde fue localizado y asesinado; Domingo Pedrero Rodríguez (y 2 hermanos), 47, concejal del Frente Popular par el PSOE, hortelano; Modesto Rodríguez, dependiente de drogería; Vitaliano Barroso del Olmo, 53, Presidente de Izquierda Republicana de Benavente, industrial; Pablo Santos Pereda, 30, obrero chocolatero; Luis Forés; Cesáreo Alonso (hermano de Venancio) y su hermana; Marcial García, “vendedor de periódicos obreros” y un tal “Patillas”. Todos fueron ejecutados.

Además, se tiene constancia de estos fusilados: Ángel Martínez Mancha, 23; –Antonio Lorenzo Villar, 35, albañil; –Antonio Lucio Camino, 40, jornalero; –Enrique Vilallarino Santiago, 25, tipógrafo, periodista; –Francisco Lozano Gavilán, 20, pescador; –Francisco Pestaña Santiago, 25, jornalero; –José Barrios Durán, 19, fundidor; –José Parra Rodríguez, 32, albañil; –José Castaño Mateos, 24, jornalero; –Julián Aparicio Gutiérrez, 46; –Luis Quijada Cantón, 38, labrador; –Luis Villar Pérez, 31; –Manuel García y Vega, 39; –Moísés , 25, industrial; –Policarpo Prieto Ruiz, 32, jornalero; –Saturnino Mañanes Villar, 21, cartero; –Simeón Sánchez Nolasco, 59; –Toribio Barros Espeso, 52; –Víctor García Gallego, 21, zapatero; –Daniela Goicoechea Roja, 54; –Jacinto Pedrero Ledo, 25, hortelano; –Francisco Mateos de Vega, 26; –Francisco Castaño Fernández, 54, vendedor; –Cesáreo Menso Viforcos, camarero ; –Daniel Prado Suárez, 20, jornalero; –Francisco Lorenzo Cortijo, 20, tejero; –Honorio Gutiérrez Rodrígez, 29, jornalero; –Isaías Rodríguez Delgado, 34, jornalero; –Miguel Colinas Pérez, 29, jornalero; –Vicente Boya Baladrón, 25, jornalero; –Alejandro Paramio Pesquero, 34, carpintero; –Alejandro Hidalgo Ferrerras, 21, dependiente de comercio ;  –Francisco Pedrero Rodríguez; –Bernardo Cuervo Vázquez, 29; –Pablo López Fernández, 54; –Buenaventura González Galende, 22, jornalero; –Andrés Castaño, afiliado a la Casa del Pueblo.


Documento original: Notas sobre la represión física, económica y laboral en la ciudad de Benavente durante la Guerra Civil y posguerra (1936-1943). Cándido Ruiz González 


En MEMORIA de las mujeres y hombres del Ejército de la REPÚBLICA Española