Los FUSILAMIENTOS de REPUBLICANOS en El Paredón de España, «El Terrer» de Paterna (Valencia). Parte 1, Los Crímenes de los nazionales

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España arrastra al menos 3.000 fosas comunes que esconden alrededor de 130.000 cadáveres de Republicanos asesinados por el franquismo tras la guerra civil, y durante los primeros años de la dictadura. Los franquistas fusilaron a más de 4.600 Republicanos en el País Valenciano. La represión tuvo especial relieve en «El Terrer», del cuartel militar de Paterna, municipio anexo a Valencia. Es el 2º con más fusilados por el franquismo en la posguerra. Se estima que durante 17 años hubo al menos 2.238 fusilados procedentes de 191 pueblos de la Comunitat Valenciana y de otros 60 municipios españoles.

Eran gentes de todo tipo y condición, profesionales liberales, médicos, abogados, empleados de banca, personajes del mundo de la cultura, escritores, actores, y una enorme cantidad de obreros de todo tipo de industria, pero la gran mayoría eran gentes del campo, jornaleros, braceros, labradores, que no eran activistas, y ni tan siquiera militaban en partido político alguno. Después de ser asesinadas, las víctimas fueron arrojadas a unas 130 fosas en el subsuelo del cementerio de Paterna. Muchos siguen sin identificar. En Paterna se halla la «Gran Fosa» de la Comunitat Valenciana.

Fueron al menos 20 las mujeres Republicanas fusiladas en Paterna. En 1939 asesinaron a Carmen Martínez Fortea, 40 años, Francisca Ballester Nogueras, 51 y Barbara Morella Ribes, 35. A Trinidad Garrigues Ortiz, 35; Rosa Font Beltrán, 29; Mercedes Martínez Ruiz, 39; y Eloina García Iranzo, 26. En 1940 cayeron Rosa Climent Grimaldo, 26; Vicenta Mena Mahiques, 26; Angelina Barber Pastor, 65; Dolores Arnal Campos, 42; Rosario Migoya Espinilla, 37; Antonia Cerda Revilla, 53; Andrea Ibáñez Segura, 47; Encarnación Iranzo Pradas, 41 y Dolores Moreno Victoria, 47. La mallorquina Águeda Campos Barrachina, 29 años, fue fusilada en 1941, el mismo año que Dolores Capella Canet, 39, y Concepción Piera Cogollos, 37. A María Pérez LaCruz, 35, la fusilaron en 1942.

En el artículo de Vicent Gabarda Cebellá se da cuenta de La represión franquista en el País Valenciano. Las historias de las inhumaciones de las fosas de Paterna resultan espeluznantes. Los represaliados eran activistas políticos o sindicales de diferentes organizaciones, CNT, UGT, Partido Comunista, Izquierda Republicana y PSOE. Esperaban ejecución en Paterna en el Penal de San Miguel de los Reyes o la Prisión Celular de Valencia.

Los reos eran conducidos atados, muchos recibían golpes antes del fusilamiento, casi todos presentan traumatismos, fracturas, orificios por fusilamiento o tiros de gracia. Los restos muestran evidentes signos de muerte por violencia y tortura crímenes imprescriptibles de lesa humanidad. Los cadáveres maniatados eran arrojados sin contemplaciones al fondo de un pozo o fosa. Después se vertía sobre los cuerpos depositados en la fosa cal líquida. La novedad y lo impactante, es que los patrones se repiten: cuerpos tirados, a una gran profundidad, maniatados y con muchos signos de violencia. La normalidad es esa repetición a la hora de asesinar y enterrar. Los fusilamientos los realizaba la guardia civil.

Rafael, un trabajador jubilado del cementerio general de Valencia, recuerda a sus 81 años que la fosa “5ª de la derecha” oculta un terrible secreto. Le contó a su nieto, Ramón, que “ya acabada la guerra, muchas veces, de madrugada, tenía que abrir la puerta del cementerio porque llegaban camiones con fusilados en Paterna y en la cárcel de San Miguel de los Reyes. Eran tantos los que traían que cómo no podían meterlos en la fosa de la 7ª Derecha, que es la que estaba abierta en 1939, porque no daba abasto con los muertos de Valencia, los metían en el cuadrante de la 5ª Derecha. Nadie se preocupó por anotar estos enterramientos en el Registro del Cementerio, simplemente llegaban en mitad de la noche y los tiraban allí sin caja y sin nada”.

Ernesto Silvestre Cove fue fusilado el 24 de julio de 1940 tras ser juzgado en un proceso sumarísimo por unos hechos que ocurrieron cuando él estaba en otro lugar. Vicente Bayona Ros, de 33 años era concejal de Sanidad y director del hospital de sangre de Cullera, no tenía las manos manchadas de sangre. Manuel Hernández Sáez fue fusilado con sólo 23 años junto con otras 38 personas, Vicente Gómez Marí, alcalde Republicano de Tavernes de la Valldigna y presidente del Consejo Municipal durante la guerra, tenía 45 años cuando fue fusilado. Su delito, luchar por la libertad. Francisco Sanz fue fusilado el 13 de julio de 1940 y arrojado a la fosa 127; en el bolsillo interior de su americana han aparecido cartas y postales y en las que detalla la lucha de su esposa, Nieve Monzó, por sacarle de la cárcel.

En esas fosas comunes, tumbas y nichos yacen gentes de toda condición social, trabajadores muy jóvenes en su mayoría, orgullosos de comprometerse en defensa de nuestra libertad. Personas enterradas como animales, hay que recuperar los cuerpos y llevarlos donde tienen que estar, a sus ciudades, a sus pueblos, con sus familiares merecen una sepultura digna.

Continúa en Parte 2, Las Fosas franquistas, y Parte 3, La Fosa de la Cultura


Documentos: Represaliados Paterna, Memoria Repressio franquista. El diario.es. El periodic. La Vanguardia (Raquel Anfrés Durá). Valencia Plaza (Pilar Almenar). El cementerio de la libertad (César garcía). Público (Alejandro Torrús). Público. Listado fusilados en Paterna (FAI). Listado 500 fusilados CNT, (Cristian Ibáñez Alessio Tutora: Marina Pastor). Levante.emv (R.C-V). El País (María Josep Serra). Foro por la memoria. La verdad. Imagen, Público


En MEMORIA de las mujeres y hombres del Ejército de la REPÚBLICA Española